Al conversar con Aleja se puede notar la pasión y el amor que le tiene a este deporte, desde que tiene uso de razón le gustó más tener un balón que jugar con muñecas. Recuerda que su padre fue quién le regaló su primer balón y fue amor a primera vista.
Cuando fue creciendo empezó a jugar en su natal Palmira (Valle) con los amigos de su cuadra “quería que me vieran igual que a ellos, quería ser mejor que ellos, y por eso hoy en día amo jugar contra hombres, ellos suelen subestimar a las mujeres y me gusta callarles la boca, porque nosotras las mujeres también podemos”.
A sus cortos 20 años ya ha representado a nuestro país con la selección Colombia sub-17, y el año pasado el profesor Fabián Felipe Taborda la citó nuevamente para hacer parte del proceso de la sub 20 y participar en el Suramericano de esta categoría, aunque lastimosamente les fue esquivo el cupo al Mundial.
En estos momentos reside en Bogotá, y hace parte del club Future Soccer, pero antes de llegar hasta donde ha escalado, le tocó salir de Palmira e irse a vivir a Ibagué (Tolima) donde empezó a jugar, eso ya hace 7 años, y luego tomó la decisión de empacar maletas y llegar a Bogotá “lugar de más oportunidades en Colombia”.
“Juego en varias posiciones pero mi favorita es de volante 6 o volante abierto”, no deja un balón por perdido y como lo dice la frase de cajón suda la camiseta, y más si es por su país.
Su próxima meta es llegar a la selección absoluta de mayores, “para eso entreno y sé que me ira muy bien, siempre con la buena energía la clave es hacer las cosas con amor”.
Cuando le pregunté sobre qué pensaba acerca de los proyectos de la Liga Femenina Profesional que hace poco el presidente de la Dimayor pronunció, contestó lo siguiente: “bueno yo solo sé que merecemos apoyo porque nosotras tenemos grandes talentos, y es irracional tener que irse del país para lograr algo mínimo en el fútbol, esta sociedad aun está llena de machismo”.
Y así lo hará ella, su próximo destino será Estados Unidos, país donde apoyan este deporte y tiene su liga profesional, su viaje estará previsto para septiembre y estudiará Administración Financiera. Mientras eso sucede seguirá perfeccionando su inglés.
Esta joven con garra y jerarquía se ha ganado un puesto en la Selección Colombia sub-20, y sé que pronto la veremos en algún micro ciclo con la de mayores, porque a ella no le queda grande nada, lo que se propone lo hace.
“Me siento orgullosa de ser mujer, deportista y representar a mi país; por eso, cada día encuentro razones para aprender que solo con disciplina, esfuerzo y dedicación los sueños se hacen realidad”.
