A inicios de esta semana, 14 jugadoras de la selección irlandesa encabezadas por Emma Byrne, anunciaron que harán un boicot contra la federación de fútbol de su país, debido a las precarias condiciones que atraviesan durante cada convocatoria. Han denunciado la ausencia de compensación económica después de cada partido internacional y en ocasiones les ha tocado cambiarse de ropa en los baños de los aeropuertos.
A esto se suma que varias jugadoras como Aine O’Gorman han declarado que tienen que sacar de sus bolsillos el dinero de su trabajo para jugar con su selección. Reveló que durante el año pasado, tuvo que pedir permiso como entrenadora personal para jugar con Irlanda por más de 40 días distribuidas en las distintas fechas FIFA de 2016.
El conjunto orientado por Colin Bell jugará un amistoso este lunes 10 de abril contra Eslovaquia en Dublín. Las jugadoras han dicho que si no se mejoran sus condiciones laborales, no disputarán este partido, tanto así que sus reclamos han sido apoyados por el sindicato de futbolistas irlandeses. La Federación de Fútbol de Irlanda ha expresado un diálogo abierto con las jugadoras para discutir sus problemas y brindarles pronta solución.
Hasta el momento las jugadoras continúan con su plan de huelga y no se ha confirmado por parte de ellas un encuentro formal con los directivos de la federación de ese país. Irlanda hasta el momento se sitúa en el puesto 32 del Ranking FIFA y ya se prepara para las eliminatorias al mundial femenino de Francia 2019.