DE LOS ERRORES, SERÁ QUE ÉL APRENDE?

Terminó la gira por los Estados Unidos con una nueva derrota 0-3 frente al seleccionado local en la tarde de ayer, si no fuera por cuatro o cinco atajadas claves de Catalina Pérez que fue la figura del conjunto colombiano junto a Carolina Arbeláez, otra sería la historia.

Pero lo que dejó aterrada a la mayoría de la afición en el país, fueron las declaraciones del ‘señor’ entrenador a la cadena Espn en su señal para el país del norte, cuando le preguntaron por el caso de Daniela Montoya, y contestó ‘ni corto, ni perezoso’ sin pena alguna: ‘Daniela Montoya está castigada, por el reclamo de los premios del mundial‘, y gracias a estas graves declaraciones, todos se hacen estas preguntas:

– Reclamar un derecho es un castigo?

– Desvelar la corrupción y la no equidad que impregna a la Federación Colombiana de Fútbol con el fútbol femenino, es castigada con veto a las jugadoras en dicho ente?

– Se está haciendo el sordo ante el país con el pedido de las cinco vetadas por parte de él y de la federación, y ahí si trae algunas jugadoras (no todas, aclaro) que son boom más por publicar fotos por redes sociales y ser más de la farándula, que por sudar la camiseta DE UN PAÍS ante el mundo?

– A este ‘entrenador’ le quedó grande la selección y lo mejor es que renuncie?
Es obvio que las cuatro respuestas son: sí, sí, sí y por supuesto que sí.

Según lo que me dicen mis fuentes, las personas que lo apoyan son contaditos con los dedos de la mano, en cambio los que desaprueban su trabajo son muchos y cientos (se incluye, el que escribe esta columna), ya que desbarató un proceso que lleva alrededor de 8 u 9 años, haciendo de este cargo más para sus intereses personales del club que preside que por el bien común. Ya ha sido considerado como ‘el entrenador del chantaje y la mentira‘, por la forma que maneja el proceso a su capricho y antojo.

En el mundial pasado, a este ‘caballero’ se le ‘apareció la Virgen‘ como se dice cuando nombraron como una especie de asistente, que no fue un asistente sino un verdadero técnico con basta experiencia en el fútbol profesional colombiano como lo es Nelson Abadía; acá no nos vamos a decir mentiras, Abadía fue el verdadero entrenador que sacó a este equipo adelante, y el otro… bien, gracias, llevándose todo el crédito. Y de un momento a otro, por miedo o por algo, el ‘tipo’ mandó a echar a Abadía y nombrar un AT que no lo conoce el mundo del fútbol, y con ese AT, están reflejados los marcadores pasados. Y otra cruz que carga este cuerpo técnico, es que no contempla lo estipulado por la FIFA en cuanto al mismo; el organismo mundial dice que el cuerpo técnico de un seleccionado nacional femenino debe estar conformado por 50% mujeres y 50% hombres, y el cuerpo técnico que fue a Estados Unidos nada más fue 99% hombres y 1% mujeres (la kinesióloga de la escuadra nacional), en resumen, este señor maneja su cuerpo técnico también por antojo y capricho porque le conviene.

Y ya hay gente de tiene que ver con medios, según lo que me dicen, que ya están diciendo: ‘pedir el reintegro de las cinco y la salida del técnico, es como que medio país llore y fuera del gremio de taxistas reclamando por la plataforma Uber‘ y esto me recuerda la frase ‘no hay peor ciego, que el que no quiere ver‘ ya que la mayoría abrimos los ojos con estos dos marcadores y alguno que otro que se sostiene en su terquedad y su forma testaruda de hacer las cosas, tal y como es su ‘sensei‘ por decirlo así.

Ojalá estos dos marcadores le hagan abrir los ojos a este hombre, sino, se le vendrá el país y hasta Dios encima, y tiene dos opciones: o sienta cabeza o ahí está la vía de la renuncia.