Una situación crítica atraviesa Brasil que no gana un partido internacional desde julio de 2018.
Mientras muchas selecciones buscan su punto óptimo de preparación para Francia 2019, por los lados de Brasil la cosa no pinta bien, ya que después de ganar la Copa América con pleno de victorias, el rendimiento de la selección sudamericana es crítico y no se vislumbra un cambio a dos meses del puntapié inicial.
El detonante de la crisis de resultados fueron sus últimas derrotas contra España por 2-1 y contra Escocia por 1-0 en la última Fecha FIFA. Si bien Marta es la mejor futbolista del mundo y con un talento envidiable para dominar el balón, no cuenta con un equipo sólido y dinámico para definir los partidos a su favor.
Brasil ha carecido de un proceso de recambio de futbolistas, puesto que algunas futbolistas han jugado dos mundiales absolutos y su seleccionador Vadao está convencido de que las jugadoras de experiencia aportan más que las juveniles.
Una de esas futbolistas es Formiga con 41 años y 6 mundiales disputados, pero en los últimos juegos preparatorios parece que los años le están pasando factura y el mediocampo brasileño es débil e inconsistente. No hay otra futbolista que iguale las capacidades de la experimentada Formiga en Brasil.
Los malos resultados también se han extendido por las categorías juveniles, a tal punto que la Sub-17 y la Sub-20 el año anterior no superaron la fase de grupos de los respectivos mundiales. Una señal de que algo anda mal en Brasil de cara al mundial y a su futuro.
Puede que Francia 2019 sea una historia distinta y puede que supere la fase de grupos ante rivales como Italia o Jamaica, pero las derrotas de los últimos 9 amistosos da una lectura preocupante sobre su preparación para Francia 2019, si con el equipo actual tiene el combustible suficiente para llegar a la final del 7 de julio en Lyon.
El Jogo Bonito que ha sido el ADN del fútbol brasileño en todas sus categorías dejó de existir. El mundial será una cita definitiva para el futuro del balompié sudamericano, y como va Brasil, que no gana partidos desde julio de 2018, no sería sorpresa que quede eliminado en fase de grupos.
Habrá que ver si el mundial será una historia distinta para un país que respira fútbol como Brasil, y si esta generación liderada por Marta tendrá su revancha de haber perdido la final de 2007 contra Alemania en su octavo mundial consecutivo.
Las 9 derrotas seguidas de Brasil en juegos amistosos deja algo firme: no está pasando por su mejor momento y podría transformarse en papelón si la preparación actual se mantenga así hasta su debut contra Jamaica. Faltan dos meses para Francia 2019 y Brasil deberá dar un giro radical a su preparación si quieren ganar su primer mundial femenino.
