Un panorama preocupante y desolador afronta el fútbol argentino, todo por cuenta de la crisis que atraviesa a nivel institucional, ya que desde casi un año no cuentan con un presidente en propiedad en la AFA y la dirigencia actual se encuentra sometida a una Comisión Normalizadora instaurada por la FIFA para aliviar sus problemas económicos y evitar su suspensión del organismo rector del fútbol mundial.
En este contexto, el país de Di Stefano, Maradona y Messi, no encuentra su norte para mejorar a corto plazo su situación futbolística, que se derivan en retrasos de los sueldos de los futbolistas, varios estadios en pésimas condiciones y equipos con deudas al borde de ser intervenidos por el gobierno de ese país. Mientras esto suceda, el fútbol femenino argentino no es ajena a esta realidad y su desarrollo en veremos.
Desde 1991 se juega fútbol femenino en Argentina, su selección nacional solo ha asistido a 2 mundiales femeninos (2003, 2007) sin haber hecho puntos y para completar, el combinado Sub-20 de Futsal no pudo asistir al Sudamericano de Paraguay por falta de presupuesto. En cuanto al fútbol doméstico, no hay un torneo nacional, sino metropolitano con equipos de Buenos Aires y el ganador va a la Libertadores Femenina.
Desde que Conmebol aprobó la Licencia de Clubes, con la premisa de que todo equipo masculino debe tener su sección femenina para competir en torneos internacionales, en el caso de Argentina, parece de no creer, pues en una infografía expuesta por el programa radial aliado El Femenino, se comprobó que de los 86 equipos afiliados a AFA, solo 16 tienen equipo femenino, no es broma, 16 clubes profesionales femeninos.
6 equipos que compiten en la Primera División Masculina, tienen sus equipos femeninos en el Torneo AFA Femenino: River Plate, Boca Juniors, Estudiantes de La Plata, San Lorenzo, Independiente y Huracán. De la Primera B Nacional (segunda división) ninguno tiene plantel femenino, en cambio de la B Metropolitana hay 6 elencos, entre los que se incluyen el actual campeón femenino UAI Urquiza y Platense.
En este orden de ideas, si para 2018 quedara campeón en el masculino, por ejemplo Lanús, no participaría de la Conmebol Libertadores 2019, por el hecho de no contar con un equipo femenino, así de sencillo. Como está el panorama actual en Argentina, es poco probable que los equipos de fútbol se animen a crear a regañadientes planteles femeninos, y el pretexto que usarán los dirigentes será la falta de dinero.
Mientras que la selección masculina, lucha por clasificarse al Mundial de Rusia 2018 para que Messi tenga su última chance de convertirse en leyenda de fútbol como Maradona, la femenina ni siquiera tiene un entrenador en propiedad y Julio Olarticochea sigue siendo interino. Desde 2014 no disputa un partido internacional, que lo mantiene por fuera del Ranking FIFA Femenino y parece que 2017 no veremos jugar a las albicelestes.
Futbolistas como Estefania Banini, Mariana Larroquete, Agustina Barroso y Yael Oviedo, luchan desde afuera para destacarse en ligas de otros países. Hasta la fecha no se ha asomado jugadoras argentinas para participar de la Liga Aguila Femenina de Colombia. Si la AFA no se pone las pilas para cumplir con la regla de Conmebol, no se descarta que Argentina desaparezca del radar del Fútbol Mundial y quede suspendido por la FIFA.
¿Qué soluciones de fondo se podrían dar para el fútbol argentino en general y sobre todo a la parte femenina?
Aldosivi de mar del plata tambien cuenta con futbol femenino