El inicio de Rossy en el balompié
La jugadora profesional decide dar un paso al costado de las canchas y trabajar día a día para el crecimiento del fútbol femenino, quedó campeona con el América de Cali en el año 2019 y espera volver al terreno de juego muy pronto ella es Rossy Lorena Caicedo.
Desde muy niña empezó a jugar gracias a que su familia es futbolera e hinchas del último club en el que jugó, América de Cali. Cuando era niña jugaba con su hermano, y su madre fue quien descubrió que a Rossy nunca le llamó la atención jugar con muñecas ya que en un regalo que le hizo utilizaba la cabeza de la muñeca como balón y la loza la usaba para simular una cancha de fútbol.
En el bachillerato era la única niña que jugaba en el equipo masculino, también jugó voleibol y baloncesto, pero lo que cautivó su corazón fue el fútbol.
Sus inicios de formación fueron en Candelaria Valle, luego participó en los torneos de Águila Roja, hizo parte de la Selección Valle y se formó como jugadora élite y profesional, también estuvo en la Selección Colombia, el Club Orsomarso y por último el América de Cali con quien quedó campeona en el año 2019.
Rossy decidió pausar su participación como jugadora activa en las canchas para seguir poniendo su granito de arena, pero de una manera diferente. La realizó para enfocar sus proyectos personales y profesionales ya que se encuentra terminando su especialización en Dirección y gestión deportiva. En sus proyectos está volver a las canchas y jugar uno o dos años más.
Selección Colombia Sub-20 (2006)
El paso de Caicedo por la tricolor se dio por medio de la Selección Valle en donde el profesor José Elmer Silva y su cuerpo técnico junto con Ramiro Viafara notaron las cualidades y capacidades de Caicedo y la vincularon al equipo para el suramericano de Chile 2006, tiempo después el entrenador Julio Valdivieso la convocó para unos juegos bolivarianos en donde quedó subcampeona.
¿Que la inspira a seguir aportándole al fútbol femenino?
Ver hoy en día tantas chicas con ganas de jugar, con un balón, que quieren llegar a los lugares donde tú has llegado, ver esas niñas que se divierten por medio de este deporte, el fútbol es el vehículo para formar íntegramente a un individuo por medio de valores, el fútbol aporta el tejido social en todos los ámbitos, como jugadora y profesional todo esto me inspira a seguir trabajando por el fútbol femenino.
¿Qué opina de la liga actual respecto a las ediciones anteriores?
Hay más visibilidad, ya hay varios medios de comunicación que le apuestan al fútbol femenino, periodistas que se encargan de visibilizar este deporte por medio de las redes sociales, la radio.
Es un gran avance, lo que hay que mejorar es que sea una Liga profesional más larga, ayudar a estas jugadoras a que mejoren su nivel, su competencia y evolución. Asimismo, los clubes que vayan conociendo esta liga, que las próximas ediciones sean más largas y que le apuesten a tener equipos profesionales y poder abrirle la posibilidad a muchas chicas que quieren jugar una liga profesional, vestir la camiseta de un equipo profesional. Esto ayudará a fortalecer una buena Selección Colombia a nivel internacional, resalto mucho la labor que hacen las instituciones que le siguen apostando al fútbol femenino, así la liga sea muy corta le siguen apostando a la participación de la mujer en el deporte y creería que ellos también necesitan tener garantías y apoyo para estructurar proyectos a largo plazo.
El fútbol también es de nosotras: Proyecto de Rossy Caicedo
Cada domingo Rossy visita un municipio del departamento del Valle en donde lleva el deporte y la actividad física a la comunidad. La invitación a que mejoren hábitos, que experimenten que es una sesión de entrenamiento, enseñarles ejercicios de fútbol. Es una actividad de integración social en donde visibilizo mi proyecto e invito a las chicas a que se animen a hacer parte de este lindo deporte, también visito los diferentes escenarios deportivos y como profesional y deportista disfruto mucho integrarme con las personas en el deporte, y más cuando tienen interés en aprender cómo es un pase, como es una conducción y sobre todo llevar el mensaje “el fútbol también es de nosotras” por medio de la actividad física.
“Disfruto mucho cuando van niñas de 6 o 7 años me preguntan acerca de mi vida, de cómo se siente jugar en un equipo profesional, en un estadio lleno, es bonito poder compartir a las personas mis experiencias, sonreír con ellos, integrarnos por medio de un balón, porque el deporte hace eso, contribuye al tejido social. A Águila roja como empresa le ha gustado mi proyecto, me apoya y siempre le ha apostado al deporte y al fútbol femenino”. Rossy ha visitado los municipios Candelaria, Palmira y Pradera llevando su proyecto deportivo y siendo ejemplo de perseverancia y solidaridad.
Instagram: @rossy_rlc.