Foto: Carlos Marín/Atlético Dosquebradas
El equipo risaraldense ha sido parte de una prueba piloto para el regreso de las actividades deportivas en el Eje Cafetero.
Mientras el país está expectante por el futuro de la liga profesional femenina de fútbol, algunos equipos del fútbol aficionado han iniciado su retorno paulatino a la actividad física tras 5 meses de pandemia.
El primer club de fútbol femenino en anunciar su retorno a la actividad es Atlético Dosquebradas, quien inició las pruebas piloto de la actividad física individualizada avalada por la alcaldía del municipio risaraldense.
Frente a la reapertura del fútbol femenino y del deporte en Dosquebradas, así se refirió el secretario de cultura, recreación y deporte del municipio, Mario Angee Villanueva:
“El propósito es diferenciar entre el entrenamiento deportivo y la actividad física individualizada que es la que orienta el Gobierno Nacional. Es por ello que nuestra Secretaría presenta a través de nuestras redes sociales y videos institucionales, la forma en que los entrenadores y deportistas deben reactivar sus rutinas deportivas. El pico de la pandemia es alto y es deber de todos cuidarnos y de igual manera reactivarnos en nuestra vida diaria“.
Este lunes se concentró un primer grupo de jugadoras en áreas individualizadas para cada una, bajo las órdenes de su entrenador Carlos Ariel Osorio, en las afueras del estadio municipal de Dosquebradas.
Osorio explicó a través de Semilleros Deportivos, los protocolos de bioseguridad que deben cumplir sus jugadoras, previo a la actividad:
“Este protocolo inicia desde el hogar, donde los deportistas deben hacer uso de productos de desinfección y guardar las medidas de bioseguridad tales como el uso de tapabocas y el distanciamiento social en el camino a sus sitios de entrenamiento”.
Durante el desarrollo de la actividad física individualizada, añadió el entrenador de Atlético Dosquebradas:
“En el campo de entrenamiento, es deber del club tomar la temperatura a la llegada del deportista, demarcar las zonas donde el deportista se cambia de ropas. Ya en el campo de entreno se deben demarcar las zonas de trabajo al igual que desinfectar, en cada rutina, los equipos de entreno antes y después de cada actividad“.
Además, destacó: “En las zonas de trabajo, cada deportista tiene sus elementos personales de bioseguridad al igual que su hidratación“.
Y deja en manos de las deportistas el protocolo posterior a la actividad con varias recomendaciones: “Este protocolo aplica igual a la llegada del deportista a su lugar de residencia, donde debe desinfectar sus zapatos y cambiarse de prendas de vestir y pasar a su respectivo baño después de tomar su temperatura“.
Así se resumen los pasos, según Atlético Dosquebradas, para el cumplimiento de los protocolos de bioseguridad:
- Desinfección de elementos
- Toma de temperatura previo al desplazamiento
- Distanciamiento social
- Inducción hacia la actividad física
- Inducción con padres de familia
- Consentimiento informado
- Tamizaje
- Control de síntomas
- Desinfección de guayos
- Calentamiento
- Ejercicios de fortalecimiento progresivo
- Actividad física individualizada
- Sensibilización con el balón
- Hidratación
- Estiramiento
- Desinfección final
- Regreso a casa
- Desinfección en casa
Dichos protocolos fueron iniciados por la Asociación de Entrenadores de Risaralda, Luis Eduardo Duke Sport, la Liga Risaraldense de Fútbol y el Deportivo Pereira; este último sirvió de base para que el fútbol femenino iniciara estas pruebas piloto a través de Atlético Dosquebradas.
A partir de estas pruebas, en caso de salir exitosas, podrían sentar una base o precedente a nivel nacional, para que otros equipos tanto profesionales como aficionados femeninos retomen gradualmente a la actividad del fútbol en Colombia, el octavo país más golpeado del mundo por el Covid-19.
