En Paraguay; como en muchos otros países, abundan las historias de superación y amor al deporte rey, el fútbol.
Por esto, Fémina llegó al corazón de Sudamérica para sumergirnos a esta linda aventura protagonizada por Arianne Quinto, joven futbolista que tuvo que pasar por grandes obstáculos para dar testimonio de que sin dudas, “El querer es poder”.
Un 31 de enero del 2001; en Asunción, nacía Arianne Jacqueline Quinto Ayala, hija de Don Vicente Quinto y Doña Emilce Ayala.
Desde pequeña supo que el fútbol corría por sus venas, y a los 12 años ya se puso a entrenar en una escuela de fútbol con varones.
Un año después, al ver por las redes sociales que el Club Olimpia estaba realizando pruebas de valores para la categoría femenina, dijo: “Me voy porque me voy”.
Fue entonces que acudió a esa prueba sin el permiso de sus padres; grande fue la sorpresa de Arianne, cuando al pasar una hora de estar dentro de la cancha vio llegar a su madre, que al notar el entusiasmo y la felicidad de su hija por estar allí, no tuvo de otra que apoyarla en su sueño de convertirse en futbolista profesional.
Primer poder, “Disciplina”
Arianne no solo es futbolista, también está por culminar la carrera de “Profesorado en Educación Física”, en la ENEF (Escuela Nacional de Educación Física). Actualmente es profesora de natación, donde trabaja específicamente con niños.
Se sabe a ciencia cierta que, llevar de la mano los estudios y el trabajo no es para nada fácil, por eso, el primer poder que define a “Ari”, sin dudas es la disciplina.
Cuando estuvo en filas del Olimpia, comenzó el cursillo de ingreso a la ENEF, iba por la mañana donde realizaban esfuerzos físicos y otras veces la parte teórica de la carrera: “Todo lo hacía a la par, nunca puse excusas. Era sacrificado, algunas veces me quedaba dormida de venida a casa, llegaba y tenía que estudiar lo teórico. Siempre digo que hay sacrificios que muchos no entienden.”, manifiesta.
En un solo año (2016) con Olimpia, fueron campeonas del torneo Apertura (sub 18), y vicecampeonas del torneo Clausura en la misma categoría. Allí fue compañera de Jessica “Pirayú” Martinez, futbolista del Real Madrid.
Segundo poder, “Valentía”
A sus cortos 20 años, le tocó sortear desafiantes trabas. Una de estas, se dio en el pasado año, donde vivió una verdadera pesadilla cuando le diagnosticaron: Fibroadenoma mamario(*).
“Cuando me enteré fue un poco difícil, ya que es una zona muy complicada del cuerpo. Esperaba mi diagnóstico para por lo menos sentirme más aliviada. Me molestaba, al principio pensé que era normal por los ciclos menstruales, pero cuando pasaron los meses fueron aumentando de tamaño y me dificultaba hacer algunos ejercicios. Al darme cuenta que se excedieron de tamaño dije: basta, con esto no se juega y busque la ayuda de un profesional”, expresa la futbolista.
Con todo lo sucedido, Arianne iba perdiendo la esperanza de volver a jugar. Pero como ella nunca adoptó actitudes negativas, transformó esta experiencia en un motivo más para pelear por sus sueños.
Se sometió a estudios para corroborar el tipo de tumor que tenía, felizmente los resultados fueron favorables, debía realizarse una cirugía para extirpar esos quistes para luego continuar con su recuperación y volver a sus actividades cotidianas.
La atleta nos deja como lección; que la vida es una cuestión de actitud, nada sucede porque sí, por ende, ser lo más valiente posible ante los problemas que se nos atraviesan.
Tercer poder, “Devoción”
No siempre somos capaces de pelear por nuestros objetivos, si bien es algo que nos proponemos desde un principio, a la larga queremos dejar todo si se nos presenta cualquier adversidad.
“Me motivó a seguir las ganas de jugar, sé que la única persona que me puede impedir a llegar lejos, soy yo misma”.
El inmenso amor y la entrega que “Ari” depositaba y deposita en cada acción que realiza, es un buen ejemplo de que no solo se necesita “querer” o “anhelar” las cosas, hay que agregarle devoción, ese entusiasmo de saber que no todo está perdido, que las cosas se están acomodando y ya llegará el momento de saborear las victorias.
Cuarto poder, “Resistencia”
De pelear por un lugar dentro del fútbol, de pasar por problemas de salud, casi cayendo a un estado de depresión, incluyendo una lesión (estuvo a 3mm de fracturarse la tibia y el peroné) que la dejaría fuera de competición por meses, a creer que ya nada iba a ser igual después de tanto.
La hoy, jugadora de Sol de América sigue escribiendo sus páginas dentro de lo que es el fútbol paraguayo, como de la vida misma.
“Llegué a bajar 12 kilos por el estrés y la preocupación. Pensé que ya no volvería a jugar como lo hacía anteriormente”, recuerda.
A base de coraje, esfuerzo y resistencia pudo sobrellevar cada impedimento que se le presentó, a su vez continuar con sus estudios y no dejarlos de lado.
“Mis padres siempre estuvieron a mi lado, ellos cumplen la función de mamá, papá, psicólogo, etc. El apoyo que me brindaron fue demasiado importante para mí”, concluye la deportista.
Quinto poder, “Fe”
La chica de los cinco poderes, quizás sea la columna vertebral de su vida y de todos los que profesan una religión o doctrina, la fe no podía faltar en este relato.
Indudablemente lo más importante que Ari posee, lo que le dio fuerzas para permanecer firme, fue su fe, que no se descompensó en ningún momento.
Arianne proclama con mucha felicidad y gratitud. “Para mi sorpresa ahora todo es mucho mejor, la vida es tan hermosa como su creador”.
No se necesita ser una persona con edad demasiado avanzada, para saber o entender cómo superar las barreras de la vida, esta joven promesa, nos regala sus cinco poderes para tomarlos como modelo y aplicarlos a nuestro día a día.
Un sueño por cumplir
La lateral de Sol de América tiene dos metas a las cuales desea llegar muy pronto, vestir y defender los colores de la selección paraguaya y ser trasferida a un equipo del exterior.
Si bien ya fue citada a la selección, no pudo integrar la lista definitiva pero la ilusión de poder algún día volver a ser llamada, sigue intacta.
Además expuso su ilusión de ponerse la camiseta de Boca Juniors, con respecto a clubes europeos no tiene uno en específico, asume que el hecho de llegar a un equipo de ese continente ya representa un gran logro.
Picadito
-Estación favorita del año: Verano
-Dulce o salado: Dulce 100%
-Jugador/a favorito/a: Cristiano Ronaldo
-Comida favorita: Soy fanática de las pastas
-Estilo de música preferido: Románticas
-Sos hincha de: De Paraguay no tengo, pero soy hincha de Boca Juniors.
(*)- Los fibroadenomas son tumores benignos (no cancerosos) de los senos comunes y compuestos por tejido glandular y de tejido estromal (conectivo). Estos tumores benignos son más frecuentes en mujeres de 20 a 39 años de edad, aunque pueden presentarse en mujeres de cualquier edad.
Por: Claudia Blanco Cuenca @claublanco_98