Países Bajos y Suecia se enfrentaron por la segunda semifinal del Mundial Francia 2019, el anhelo era completamente naranja, pues sería la primera final en la historia por parte de la ‘naranja mecánica’. Además, ese sueño se cumplió tras la larga espera gracias al solitario gol de Jackie Groenen en el alargue después de la igualdad a cero goles.
Iniciaban los actos protocolarios y después de los himnos, un minuto de silencio se llevó a cabo. El motivo, conmemorar la vida de Florijana Ismaili que fue hallada sin signos vitales el martes 2 de julio.
Después de 28 años, en la antesala del partido, se sabía que volvería a ver una final entre CONCACAF y UEFA. En esa ocasión, las americanas, como es de costumbre enfrentaron a Noruega en la apertura del Mundial en 1991. Estados Unidos eliminó a Inglaterra y la espera era ver cuál sería su contrincante entre Países Bajos o Suecia.
El camino para llegar al Estadio Parc Olympique Lyonnais fue difícil para ambas, pero no imposible para dar la sorpresa por parte de las neerlandesas. Las dirigidas por Sarina Wiegman dejaron de lado a Japón y a Italia. Por otro lado, las orientadas por Peter Gerhadsson eliminaron a Canadá y a la bicampeona Alemania en 2003 y 2007. Así las cosas, Países Bajos soñaba con alcanzar su primera final, mientras que Suecia revertir la historia de 2003 cuando perdieron el título ante las teutonas.
Pocas opciones en la igualdad en la primera parte
Las emociones empezaron desde temprano y así iniciaba el camino neerlandés en busca de un prematuro gol. Sobre los tres minutos, Países Bajos se acercó por medio de Vivianne Miedema con un disparo al pórtico sueco.
Posteriormente, Suecia reaccionó con un remate de Stina Blackstenius atajado de gran manera por Sari van Veenendaal. Seis minutos después, sobre los 19, Magdalena Eriksson cobró un tiro libre cerrado que manoteó la golera neerlandesa al córner.
Sin duda alguna, Suecia buscó más, mientras que Países Bajos esperaba una pelota parada para vulnerar el pórtico sueco. Sari van Veenendaal logró salvar milagrosamente el disparo de Lina Hurtig tras un mar de dudas en el despeje neerlandés. Así, con mejores opciones para Suecia, pero con la igualdad a cero tantos, finalizó la primera parte.
La igualdad continuó en la segunda etapa
El complemento inició con nuevas opciones para Suecia y con mucho nerviosismo en Países Bajos. Sobre los 47 minutos, Dominique Bloodworth perdió el balón, pero se rehízo para evitar el disparo de Stina Blackstenius en el área. Esa incesante búsqueda sueca se hizo más fuerte y estalló el sonido metálico que inquietó a 48,900 espectadores tras el latigazo de Nilla Fischer.
Ocho minutos después, Países Bajos también produjo un sonido metálico contra el travesaño. En el fuerte neerlandés, la pelota parada, Vivianne Miedema cabeceó y Lindahl manoteó desviando el balón al larguero. Para volver a reseñar alguna jugada de riesgo, vale remontarnos al minuto 87, Magdalena Eriksson cobró un tiro libre que se quedó en el tejado neerlandés.
Así las cosas, la expectativa era qué podía suceder el tiempo extra con dos selecciones que nunca arriesgaron. Por esta razón, había la incógnita de una posible tanda de penales, un lugar al que nadie quiere llegar en esta instancia.
Una espera vestida de naranja: Países Bajos a la final
Sin duda alguna, Estados Unidos tendría le ventaja en cuanto a días de descanso frente a cualquiera de estas dos selecciones. Sin embargo, no tuvo que definirse desde el punto penal y esto porque Países Bajos logró concretar con un latigazo de Jackie Groenen rasante que se coló en el pórtico sueco.
Poco o nada pudo hacer Suecia para evitar ese tanto que llegó por sorpresa dado el desarrollo del juego. De hecho, Suecia no logró inquietar a Sari van Veenendaal durante los 30 minutos de más y Países Bajos aprovechó. De esa manera, las neerlandesas jugarán su primera final en la historia del combinado nacional a nivel femenino. Por otro lado, las suecas esperarán la oportunidad en otra cita orbital de revertir el subcampeonato de 2003.