#BlackWomanFootball es el nombre de la campaña global en contra del racismo en el fútbol femenino del Perú.
“Negra cochina”, “cocodrilo” fueron algunos de los insultos que recibió Fabiola Herrera cuando disputaba la final de la Copa Perú junto a su equipo JC Sport Girls, en el año 2018.
Se jugaban los últimos minutos entre JC y la Cantera, dos de los equipos grandes que siempre disputaban los primeros lugares del campeonato peruano.
Fabiola, plantada en su zaga, defendía los colores de su camiseta color negro con todo. Balón que le llegaba lo rechazaba, o en el mejor de los casos, salía dominando y driblando rivales como en la mayoría de veces cuando era niña; porque la insultaban por su color de piel o por el simple hecho de querer jugar al fútbol.
Así, de esa manera, volvió a encontrar a un troglodita en la tribuna que quiso sacarla del partido lanzándole improperios porque, en el equipo contrario para el que hacía barra, jugaba su hija. Sí, era un padre de familia que no se le ocurrió mejor idea que insultar al rival como sinónimo de arenga. “Yo trataba de no hacer caso, me concentré en el juego porque sabía que faltaban pocos minutos”, cuenta Fabiola.
Pero tras el pitazo final, y con la victoria a favor de su oncena, los insultos continuaron y Herrera reaccionó como sólo los grandes lo hacen: con aplomo, inteligencia, solvencia y mucho orden. Características típicas de la número 17 sobre el gramado. “Me quité la camiseta y besé mis brazos en señal de orgullo. Le demostré que el color de mi piel es muy hermoso”, relata.
Tras esa escena, las disculpas para Fabiola Herrera no llegaron como imaginó, sólo unas palabras de aliento por parte de la directiva no sanaron la herida, “Nunca reaccioné de forma violenta porque no es mi estilo, sin embargo creo que los clubes y la misma Federación deben tomar acciones para combatir la discriminación”, comenta la jugadora que siempre tuvo el apoyo de su familia y sobre todo de su hermano Jhoel Herrera, jugador profesional de fútbol que también sufrió discriminación.
Este es un episodio de los muchos que Fabiola Herrera, ex jugadora del Millonarios de Colombia, tuvo que soportar en su niñez, adolescencia y juventud. La muchachita a la que le tuvieron que cambiar de nombre para poder jugar al fútbol con niños, cuando tenía menos de 10 años, nunca perdió su identidad. Juan Lucho, es ahora un recuerdo en la memoria de una deportista que, paradójicamente, luchó contra todo tipo de discriminación para convertirse en profesional y llegar a ser la primera futbolista del Perú en fichar y jugar por un club del extranjero con contrato profesional de fútbol.
Hoy, Fabiola, actual fichaje de Universitario de Deportes con el que disputará la Copa Libertadores, junto a otras dos deportistas afroperuanas; como Miryam Tristán y Marisela Joya, impulsan la campaña #BlackWomanFootball que tiene como objetivo erradicar la discriminación racial en Perú.
Un movimiento que se ha creado a raíz de #BlackLivesMatter Football, promovida por la red europea: Fare Network.
Herrera, ha contado su historia de vida en un documental que retrata los pasajes más tristes de su infancia pero también los más alegres, aquellos que le permitieron llegar al seleccionado de su país y defender los colores de varios equipos de la capital peruana, así como el azul de Millonarios.
Puedes revisar la campaña y sus diversas actividades junto a Mujeres Fútbol Club y DeportVida, organizaciones del Perú que reproducen el movimiento en sus tierras.
Video de Fabiola en YouTube
Por: Milagros Loayza Salazar – Periodista de Mujeres Fútbol Club