No hay duda de que Atlético Huila es el mejor equipo de Colombia y posiblemente del continente.
En su corta vida como equipo femenino, Atlético Huila ha sabido manejar con prudencia y humildad su proceso. Muestra de ello un subcampeonato en 2017 y el título este año, tras vencer por penales a Nacional.
Un equipo que nunca paró, que después de la final de 2017 se preparó, se reforzó y se lució esta temporada. Jugaron amistosos el semestre anterior sin haber liga y sus resultados fueron evidentes.
La llegada de refuerzos como Yoreli o Cometti, le dieron solidez y eficacia al funcionamiento táctico del equipo. Sumado también a la experiencia de Virgilio Puerto para confeccionar un equipo competitivo y ganador.
Huila dio una lección de liderazgo y profesionalismo. Para ganar una liga como la femenina, debía reforzarse mejor y conservar su base de jugadoras, cumplió y su próximo desafío será la Copa Libertadores.
Todas y cada una de sus jugadoras fueron esenciales para el título, sobre todo Daniela Solera. Una portera que se recuperó de su reciente enfermedad y se vistió de heroína con sus brillantes atajadas.
Ni que decir de Aldana Cometti, una jugadora físicamente alta y férrea en su posición. La argentina se convirtió en pieza fundamental de la defensa opita, la valla menos vencida de la Liga.
Yoreli hizo borrón y cuenta nueva tras su paso por Patriotas. Nos mostró su calidad y frescura para armar jugadas de gol, e inclusive marcar goles. La vida le dio revancha y se pudo consagrar como futbolista en Colombia.
Finalmente, Karla Torres demostró todo su poderío goleador, hizo goles de todo tipo, incluso de chilena. Cierra la temporada siendo la máxima goleadora de su equipo y con la ilusión de jugar la Libertadores con Huila.
Otras jugadoras como Carmen Rodallega o Ingrid Vidal aportaron su experiencia para la conquista de su primer título, al igual que Fabiana Vallejos y su capitana Gavy Santos como defensora líbera.
Por donde se le mire, Atlético Huila es un justo y merecido campeón. Aplaudo su impecable campaña dentro y fuera de las canchas. Ojalá hayan más equipos así de competitivos y bien organizados el próximo año.
Mención especial para el presidente Juan Carlos Patarroyo, por la gestión realizada con el equipo femenino, por hacerlas profesionales y por consolidar un proyecto encaminado hacia la excelencia deportiva.
Qué lindo ver a las jugadoras del Atlético Huila cantar el himno del departamento en los actos protocolarios. Es muestra fehaciente de la identidad y el amor que llevan las futbolistas por los colores de su equipo.
No bajaron los brazos, lucharon y vencieron. ¡Felicitaciones Atlético Huila Femenino. Las Opitas Superpoderosas!