Después de los primeros tres Mundiales, Fémina Fútbol presenta la historia de las siguientes dos citas orbitales. Esperamos puedan conocer más en un nuevo especial, con miras a Francia 2019
Tras tres copas del mundo de gran calibre con dos títulos a favor de Estados Unidos y uno para Noruega, todo estaba listo para la cuarta edición en 2003.
Así las cosas, China oficiaría su segundo Mundial después de lo que se vivió en territorio asiático en 1991. Sin embargo, el prestigioso torneo que iniciaría el 23 de septiembre hasta el 11 de octubre tuvo que ser reasignado.
En la provincia de Guangdong, China en noviembre de 2002, un virus atacó el suelo asiático. Su origen, al parecer fue causado por una zoonosis, es decir, transmitido por animales, en este caso, murciélagos.
El síndrome respiratorio agudo grave, capaz de matar a quien padezca la condición, se propagó alrededor de todo China llegando en febrero de 2003 a Hong Kong.
Para abril de 2003, después de 500 casos de muertos por la contagiosa enfermedad, Jiang Yanyong, un físico chino se encargó de volver viral esta situación que el país vivía. Por esta razón, la FIFA se percató de lo sucedido e inmediatamente buscó una alternativa para la venidera cita orbital.
De igual forma, el 26 de mayo se oficializó la nueva sede del Mundial. De acuerdo a la gran labor que tuvo Estados Unidos en 1999, la FIFA pensó que en territorio norteamericano habría mejor organización ante la emergencia.
Así fue que se definió a falta de escasos meses para el Mundial el cambio de sede.
La antesala del cuarto Mundial Femenino
Por la difícil coyuntura, China debía tener entre ojos a Estados Unidos. Pues ya habían perdido la candidatura ante Estados Unidos en 1999 y ahora, cuatro años después, volvían a perderla.
Tras la tragedia, todo estaba listo para que en septiembre iniciara la cuarta prestigiosa cita que acapara la mirada del mundo entero y la participación de 16 combinados nacionales.
Además, a raíz de la sorpresiva elección de la sede, la anfitriona se empezó a mover para mejorar la infraestructura. Sin embargo, como todo fue muy rápido, tuvieron que usar estadios de menor capacidad que los de 1999. En contraste a hace cuatro años, los recintos pasaron de tener una capacidad aproximada para 90,000 espectadores a albergar 69,000. Sin duda alguna, la diferencia era abismal, no obstante, con menor capacidad, el Mundial fue un éxito.
Como es costumbre, Europa tuvo más cupos que las demás confederaciones. Francia debutó y acompañó a Alemania, Suecia, Noruega y Rusia.
En África, Ghana y Nigeria disputaron la final, la cual ganaron las nigerianas. Así, las dos finalistas se instalaron en la cita orbital.
Sudamérica amplió su límite a dos selecciones. Brasil, por haber ganado la eliminatoria de 1998, clasificó a segunda ronda directamente. Por otro lado, Argentina aprovechó ese segundo boleto para debutar en el próximo Mundial.
Finalmente, en Asia, China, como premio por lo sucedido ingresó directamente al Mundial. Esto amplió la lista de selecciones asiáticas Japón, Corea del Norte y Corea del Sur, debutante, también ingresaron al torneo.
Ante la emergencia, llegó la reestructuración
Antes de entrar de lleno con la Copa, vale destacar que aunque China entró por ser la anterior sede, hubiese también clasificado por su desempeño en la Copa Asiática. Sin embargo, infortunadamente, y siguiendo un mal año, también perdieron el título frente a Corea del Norte.
Debido a la reprogramación del torneo por el cambio de país sede, la FIFA tomó medidas drásticas. De la mano con la Federación de Fútbol de los Estados Unidos, programaron la realización de partidos en jornadas dobles. Así, se emparejaron los grupos A y D y B y C en doble jornada, pero divididos entre dos ciudades.
Además, el Grupo D tuvo el privilegio de estrenar el nuevo estadio Home Depot Center fundado en junio de 2003.
Una fase de grupos de poca acogida
En el Grupo A, Estados Unidos venció con comodidad a Suecia, Nigeria y Corea del Norte. De hecho, para el bien de las estadounidenses, una nueva esperanza empezaba a hacerse notar con la presencia de Abby Wambach, quien marcó dos goles en esta fase. Por otro lado, Suecia también clasificó a cuartos como segunda con 6 unidades.
El Grupo B contó con dos debutantes como Francia y Corea del Sur. Sin embargo, ninguna de las dos pudo brillar en su primera participación al no lograr clasificar a la siguiente fase. Al igual que en el combinado estadounidense, en Brasil también había una gran esperanza en Marta Vieira da Silva, la cual marcó dos goles en la fase de grupos.
Argentina debutó con tres derrotas frente a su similar de Alemania, Canadá, las cuales obtuvieron su boleto a cuartos y ante Japón. Por esta razón, los ojos estaban puestos en dos selecciones en particular, Estados Unidos y Alemania.
Finalmente, en el grupo D, el premio fue para China que clasificó ganando dos encuentros y empatando el otro. Por otro lado, Rusia, al vencer a Ghana y Australia, logró acompañar a las asiáticas en cuartos de final.
Aunque había gran expectativa en este Mundial por lo hecho en 1999, la afición en Boston, Los Ángeles y Portland, rondó en menos de 30,000 espectadores.
Canadá dio la sorpresa ante China
Estados Unidos tuvo que enfrentar a un viejo conocido, Noruega. Además, las escandinavas llegaban con el título de campeonas en los Juegos Olímpicos de Sydney en el 2000. Con un solitario gol de Abby Wambach, a las estadounidenses les bastó para clasificar a semifinales. Sin duda alguna, ya era un gran logro para la jugadora de 23 años.
Marta siguió la pisada de Abby con su tercer gol en el certamen, esta vez ante Suecia. Sin embargo, las suecas vencieron dos goles por uno a su rival.
Alemania certificó su posición como favorita al golear siete goles por uno a su similar de Rusia. Birgit Prinz, quien finalmente fue la goleadora del torneo, marcó dos goles.
Lo siguiente en los cuartos de final fue el encuentro entre la ‘cenicienta’, Canadá, enfrentando a China. Las canadienses no habían podido pasar de la primera fase en sus dos participaciones y querían cambiar esa historia con un promedio de edad de 22 años. Por otro lado, las asiáticas eran las favoritas en este Mundial y pese a lo negativo, no fueron vistas como menos. Sobre los siete minutos, Charmaine Hooper, la capitana y veterana de 35 años, marcó el único gol. Así, la despedida de Sun Wen del seleccionado chino, no fue la mejor.
Christine Sinclair, quien disputaba su segundo Mundial, manifestó que para muchos fue una sorpresa, “cuando vencimos a China para llegar a semifinales, creo que muchas personas estaban sorprendidas. No obstante, como equipo sabíamos que nos habíamos preparado bien”.
Alemania, la inesperada campeona
Sonia Denoncourt, juez central del partido entre Estados Unidos y Alemania, no escondió en sus testimonios que se trataba del mejor juego. “Esta semifinal era para muchos una verdadera final, por esta razón era un privilegio pitar este juego. Cualquiera quería ganarlo”.
Alemania encontró el primer gol con Kerstin Garefrekes al minuto 15. Aunque Estados Unidos trató de igualar, Silke Rottenberg lo impidió rotundamente.

Siike Rottenberg 2003
Las teutonas aprovecharon la ineficacia norteamericana para liquidar el juego en el tiempo agregado gracias a Maren Meinert y Birgit Prinz. Así las cosas, este fue el último Mundial de jugadoras como Mia Hamm, Julie Foudy y Joy Fawcett.
Maren Meinert le agregó al partido que, “Alrededor de 700,000 alemanes vieron el partido, fue un gran éxito haberle ganado a las defensoras del título en su propio país”.
Por su parte, Canadá pretendía llegar a la final cuando Kara Lang, de 16 años abrió el marcador. Sin embargo, rápidamente, Suecia igualó y le dio la vuelta al compromiso con goles de Malin Moström y Josefine Öqvist.
Posteriormente, las anfitrionas se quedaron con el tercer puesto al vencer a las canadienses tres goles por uno
Por otro lado, así como en 1995, Alemania enfrentaba en la final a un país escandinavo como Suecia. Al frente de 26,000 espectadores, el Home Depot Center estalló en un grito de campeón de las teutonas al minuto 98, cuando Nia Künzer marcó el gol de oro.

Nia Künzer, autora del gol de oro
La alegría teutona
Sin duda alguna, el 12 de octubre de 2003 fue un día histórico para el fútbol mundial. Alemania se convertía en la única Selección en ganar el Mundial masculino y femenino, algo que todavía mantiene. Además, Nia Künzer, probablemente nunca olvidará ese grito de gol. La teutona ingresó en el segundo tiempo y su único gol del certamen fue el más importante de todos. Aparte, la final será recordada por haber sido la única definida por gol de oro en la categoría femenina.
Birgit Prinz, goleadora con siete dianas y jugadora del torneo manifestó que desde que comenzó, buscaban ser campeonas. “Estábamos trabajando para conseguirlo desde hace mucho tiempo, era un sueño y el más grande que podíamos conseguir. Nos tomará años para tener una mejor Selección que esta”.
Recompensa en territorio asiático
Como en 2003 China había sido designada como sede, pero debido a la epidemia de Síndrome respiratorio agudo severo, el torneo se llevó a cabo en Estados Unidos. Por esta razón, la FIFA le otorgó en solitario la organización a China. Es decir, no hubo competencia de sedes hasta 2011 cuando Alemania le ganó a Australia, Perú, Canadá, Francia y Suiza.
China fue justamente recompensado con oficiar como anfitrión del quinto Mundial y a raíz de su confirmación, empezaron a ver qué recintos deportivos estaban disponibles. Pues, en Pekín se jugarían los Juegos Olímpicos de 2008 y otros estadios estaba en remodelación.
Así las cosas, cinco ciudades acogieron a nuevamente, 16 selecciones. Entre ellas, Tianjin, Wuhan, Hangzhou, Chengdu y Shanghai, siendo el Tianjin Olympic Centre Stadium el de mayor capacidad con 60,000 espectadores.
Australia, quien disputó la eliminatoria asiática, dado que en Oceanía no había buena competencia por la facilidad del torneo, clasificó con China como sede, Corea del Norte y Japón. Sin embargo, las japonesas sufrieron porque tuvieron que jugar repechaje ante México venciendo a la ‘Tri’.
En África, como es característico, Nigeria y Ghana clasificaron al ser finalistas en la confederación. Nueva Zelanda aprovechó la partida de Australia para clasificar en Oceanía. Estados Unidos y Canadá clasificaron al Mundial. Por Europa, Inglaterra, Alemania, Suecia, Dinamarca y Noruega clasificaron. Finalmente, en Sudamérica, Argentina le arrebató el título en el Sudamericano a Brasil, por ello, la ’albiceleste’ y la ‘canarinha’ clasificaron como hace cuatro años.
Récord histórico en la fase de grupos
El 22 de abril de 2007 en Wuhan se efectuó el sorteo para la fase de grupos. China y la defensora Alemania, fueron designados cabezas de grupo sembrados en el D y A respectivamente. Por otro lado, el B y el C se definió por medio de la clasificación mundial femenina de marzo de 2007. Por esta razón, Estados Unidos y Noruega (primera y tercera, dado que Alemania era la segunda) ocuparon el segundo y tercer grupo respectivamente. Además, las demás 12 selecciones, fueron sembradas en los distintos grupos, la FIFA buscaba que no hubiese más de dos equipos de la misma confederación en cada grupo.
El Mundial inició con el partido entre Alemania y Argentina. Las teutonas se perfilaban como candidatas, no solo por ser las actuales campeonas, sino porque vencieron 11-0 a las gauchas, lo que hoy por hoy, es el récord en un juego del Mundial.
Después de la victoria, Kerstin Garefrekes dijo que la intención era ganar la Copa, “llegamos acá para ganar la Copa del Mundo, no para defender nuestro título. Cada una adoptó este sueño y por esta razón, no teníamos pensamientos de perder ningún juego. Trabajamos día tras día arduamente y esforzándonos para ganar este torneo”.
Sacando esa estruendosa victoria, este Mundial demostró ser más competitivo y eso se demostró en el juego entre Inglaterra y Japón igualado a dos goles. Por el Grupo A, Argentina no sumó ninguna unidad y Alemania e Inglaterra clasificaron a cuartos.
Australia, triunfo y clasificación histórica
Antes de entrar a los demás grupos, vale resaltar que Inglaterra accedió por primera vez a cuartos de final. Al respecto, Kelly Smith, referente británica expresó su felicidad de jugar en los mejores recintos deportivos, “jugar en los mejores estadios, simplemente era algo de otro mundo. Jugar al frente de 30,000 espectadores y anotar valiosos goles, era simplemente un sueño”.
Ahora bien, así como hace 17 años, Estados Unidos sobrepasó su grupo con facilidad y con Abby Wambach, querían volver a conquistar China. Además, Kristine Lilly disputó su quinto Mundial. Aparte de las estadounidenses, Corea del Norte también clasificó a los cuartos de final.
Noruega clasificó en el Grupo C igualando ante Australia y venciendo a Ghana y Canadá. Por otro lado, las ‘Matildas’ disputaron su cuarto Mundial consecutivo y hasta la fecha no habían podido ganar. Sin embargo, el debut fue soñado venciendo a las africanas cuatro goles por uno gracias a dos goles de Lisa De Vanna, goleadora histórica con 47 tantos en 147 juegos. Además, esto no solo se quedó en la primera victoria, también lograron por primera vez, clasificar a cuartos de final.
Dos meses antes de que iniciara el Mundial, Brasil ganó los Juegos Panamericanos, en parte, gracias a la habilidad de Marta. Posteriormente y volviendo a la cita orbital, la ‘canarinha’ se midió ante la anfitriona, China, Dinamarca y Nueva Zelanda.
Hasta cuartos de final llegó China
Ante todo pronóstico, una Selección sudamericana parecía tener la oportunidad de llegar lejos en este Mundial. Brasil fue una aplanadora que venció a Nueva Zelanda, China y Dinamarca, en ese orden con resultados de 5-0, 4-0 y 1-0 respectivamente. Sin conceder goles, clasificaban a la siguiente fase con un dominio ofensivo destacando a Marta y Cristiane Rozeira. Aunque China se fue goleada, logró acceder a cuartos de final.
En los cuartos de final, Alemania se vio las caras ante Corea del Norte. Las europeas vencieron a primera hora a las asiáticas con un marcador de 3-0, con un gol de Kerstin Garefrekes.
Después de ese cotejo, Inglaterra disputaba por primera vez esta fase, y justo contra el coco más grande: Estados Unidos. Aunque las británicas aguantaron 48 minutos, Abby Wambach abrió la cuenta para que posteriormente, Shannon Boxx y Kristine Lilly se unieran a la fiesta. Además, el gol de la capitana fue la última anotación antes de su retiro profesional.
Brasil continuó a semifinales al vencer a Australia 3-2, Formiga y Marta adelantaron rápidamente a las sudamericanas. Aunque las ‘Matildas’ lograron igualar a dos goles, a falta de 15 minutos para el final del partido regular, Cristiane marcó el lapidario gol.
China, en presencia de 52,000 espectadores enfrentó a Noruega. Tras un error de Wang Kun, Isabell Herlovsen vulneró el pórtico de Zhang Yanru para clasificar a semifinales.
Brasil a la final, seria candidata al título
Alemania y Noruega se enfrentaron en la primera semifinal. El historial entre ambas marcaba 23 juegos y las teutonas llevaban la ventaja con una victoria más que las escandinavas. Sin embargo, había sed de venganza por el juego más importante, la final de 1995. Así, 12 años después, Alemania tuvo su revancha al vencer a las noruegas 3-0. Para fortuna alemana, las escandinavas hicieron más fácil la victoria con tres errores propios con dos desvíos y con una mala entrega a la golera. Así, esta era la segunda final consecutiva para las teutonas. Además, Birgit Prinz se convirtió en la primera jugadora del mundo en disputar tres finales (1995, 2003 y 2007).
En la otra semifinal, Brasil enfrentó a Estados Unidos que era el primer examen duro para Jorge Barcellos. Sin embargo, y nuevamente ante todo pronóstico, la mejor dupla en el Mundial se juntó para eliminar a las americanas con doblete de Marta y un gol de Cristiane, además del autogol de Leslie Osborne con el que se abrió la cuenta. Aparte de la goleada, Marta demostró su habilidad en su segundo tanto. Un pase filtrado hacia la delantera terminó con un taco saliendo de la marca de la zaguera estadounidense, enganchó y definió sobre el cuerpo de Briana Scurry. Estados Unidos se vio mal y esta fue la derrota más amplia en su historia.
Alemania primer bicampeón femenino
A primera hora, por el tercer y cuarto puesto, Estados Unidos enfrentó a un viejo conocido: Noruega. Las estadounidenses, sin piedad vencieron a su rival con un marcador 4-1. Sin embargo, todas las miradas estaban puestas al partido más importante entre Alemania y Brasil.
Shanghai recibió a 30,000 personas y para este Mundial, hubo televisores de gran calidad alrededor de todo el mundo para poder ver la final. Además, por fin se veía un poco la igualdad que la rama femenina necesita. Para esta cita orbital, decidieron justamente premiar la labor de las jugadoras con valor monetario, 1,000,000 de dólares estaban en juego. Así las cosas, recién iniciado la segunda mitad, Birgit Prinz anotó el primero de las teutonas.
Posteriormente, una infracción en el área de Alemania terminó en pena máxima a favor de las sudamericanas. Marta cobró, pero Nadine Angerer evitó la igualdad.
Brasil continuó dominando las opciones, sin embargo, Nadine se hacía gigante en un arco que no había sido vulnerado. Finalmente, a falta de cuatro minutos para el final, Renate Lingor cobró un tiro de esquina que encontró la cabeza de Simone Laudehr para decretar el segundo y lapidario gol.
Así finalizó otro Mundial más y uno perfecto para Alemania que no recibió ningún gol a lo largo del torneo. Además demostró su poderío ofensivo con Birgit Prinz en el mando y con 21 tantos a favor. Silvia Neid, estratega alemana, manifestó que después del penal, ya se veían campeonas.
Foto: FIFA
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