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Los hechos ocurrieron en la noche del 4 de noviembre, solo hasta la mañana de este miércoles se produjo la detención.
El fútbol femenino francés se ha estremecido este miércoles con una noticia de no creer, tras conocerse la detención esta mañana de la jugadora del Paris Saint-Germain, Aminata Diallo, horas después de haber disputado el partido de su equipo contra el Real Madrid por la fase de grupos de la UEFA Champions League Femenina, en el Parque de los Príncipes.
Hasta su domicilio en Marly-le-Roi, en París, llegó la policía para detener y poner en custodía a la futbolista de 26 años, la cual ha sido imputada por presunta agresión física contra su compañera Kheira Hamraoui, quien se encuentra recuperándose de las secuelas que dejó una golpiza y que la marginó de las más recientes convocatorias de su equipo.
Los hechos se produjeron el pasado 4 de noviembre, una noche en la que tanto Diallo como Hamraoui estuvieron en una fiesta organizada por el PSG en el restaurante Bois de Boulogne, luego ambas jugadoras fueron interceptadas por dos hombres encapuchados cuando viajaban en un vehículo regreso a casa y sacaron de allí a la fuerza a Kheira Hamraoui.
A continuación, ambos agresores que hasta el momento no han sido identificados, atacaron con sevicia a la humanidad de Hamraoui con barras de hierro, dejándola gravemente herida en piernas y manos, y que le produjo varios puntos de sutura en las partes afectadas de la ex-jugadora del FC Barcelona, una vez remitida al hospital.
La policía tiene fuertes indicios que implican a Diallo como autora intelectual de la agresión, puesto que en la noche de los hechos no fue agredida como a su compañera, y que todo apuntaría a una disputa interna entre ambas jugadoras por un puesto en las convocatorias a los partidos de la liga local y la Champions League Femenina.
Hamraoui de 31 años, se encuentra recuperándose, mientras que el PSG en un reciente comunicado sigue atento el caso y tomará medidas para proteger la integridad física de sus futbolistas. Adicional, el club condena los hechos violentos en contra de Hamraoui y colaborará con la justicia para esclarecer los móviles y dar con los agresores de la futbolista.
Un caso que se asemeja al ocurrido en 1994 entre las ex-patinadoras de hielo Tonya Harding y Nancy Kerrigan, que motivó a la primera a sacar de competencia a la última a través de agresiones físicas para ganarse un lugar en el equipo olímpico de los Estados Unidos a los Juegos Olímpicos de Invierno celebrados en Lillehammer, Noruega.