La mediocampista de Alianza Lima le contó a Fémina Fútbol su recorrido y de dónde nació su pasión por el fútbol.
Myriam Tristán, uno de los últimos fichajes de Alianza Lima, miembro de la Selección de Perú desde el 2004 y también entrenadora de la selección de fútbol de damas del Colegio de la Inmaculada de Lima en el 2019. Ella empezó jugando en el Sporting Cristal a los 13 años, luego en Universitario de Deportes, pasó por PetroPerú, después hizo parte del JC Sport girls, estuvo en la Municipalidad de San Borja, el Club la Cantera y el Deportivo Municipal. La ganadora de los juegos bolivarianos del 2005 hoy tiene de frente todos sus sueños, el más grande, hacer que el fútbol femenino se solidifique cada vez más.
¿Cómo empezó su camino en el fútbol?
El gusto por el fútbol desde que tengo uso de razón fue más o menos a los 3 años. Empecé a jugar con los niños de mi barrio que eran de mi edad y crecí jugando fútbol con ellos y le agarré el gusto desde muy pequeña, hasta el día de hoy que lo sigo practicando y lo sigo jugando en equipo profesional.
Hice otros deportes, pero me inclino por el fútbol, antes era muy difícil jugarlo o de repente estar en una academia porque siempre había muchos paradigmas como, por ejemplo, las mujeres no jugaban al fútbol o algo por el estilo, pero no importó. Yo desde ahí le agarré el gusto y hasta el día de hoy no he parado.
¿Cuáles fueron las personas que la apoyaron?
Las personas que nunca me fallaron fueron mi papá, mi mamá, mis hermanos, mi familia y un entrenador de vóley. Mi entrenador tenía un conocido en el fútbol y él me llevó a probarme al equipo donde inicie, que es el Sporting cristal. Todos ellos siempre me apoyaron hasta hoy, mis padres me apoyan y yo estoy muy agradecida con ellos por todo el apoyo que me han dado.
¿Qué obstáculos encontraste en el camino?
Fueron muy pocos los obstáculos. De repente el tema económico, el traslado a donde entrenaba era más o menos una hora y media y tenía que levantarme a las 5:30 de la mañana para poder ir. Tenía 13 años, quizá eso fue uno de los obstáculos, pero igual lo superé y bueno con el pasar del tiempo realicé muchos sacrificios porque entre el estudio y el entrenamiento más la distancia de ambas cosas se fueron haciendo difíciles, pero después yo superé cada uno de esos obstáculos gracias a Dios. Además, con eso del apoyo que la Selección no nos daba en ese momento hacía que las cosas fueran más difíciles, lo bueno es que siempre conté con la ayuda de mis padres.
¿Cuáles son los triunfos que más recuerda?
De los triunfos que más recuerdo fue los Bolivarianos del 2005 que fue en Colombia, en Armenia y Pereira, campeonamos. Fuimos campeonas bolivarianas ese año y creo que es uno de los triunfos que me ha marcado más y el que más recuerdo. Por primera vez Perú campeona o en algún evento deportivo así sea bolivariano, no había tantos equipos, pero creo que es el primer triunfo que tiene la selección peruana femenina.
Además, que el fútbol me ha dado los recuerdos más bonitos que tengo, uno de ellos es el proceso de selección, todas las personas que he conocido por medio del fútbol, amistades que hasta el día de hoy las mantengo y los triunfos que he tenido con el fútbol. Porque por medio del fútbol he podido estudiar, he podido salir adelante con muchas cosas y creo que esos son los momentos más bonitos que puedo tener.
¿Qué falta para que se desarrolle mejor el fútbol femenino en latino América?
Falta apoyo de los clubes y de las federaciones, que los torneos sean más largos y se realicen con más frecuencia para que estemos activas la mayor parte del año. Nosotras, las deportistas y jugadoras de fútbol, tenemos que estudiar, trabajar y entrenar, eso hace que no estemos activas al 100%. Yo creo que falta mucho más apoyo tanto de los clubes, para que seamos profesionales, como de las federaciones.
Un mensaje que le quiera dar a las niñas que quieren ser futbolistas profesionales
El mensaje que le puedo llegar dejar a las niñas es que sigan sus sueños, que luchen por lo que quieren, que se esfuercen al máximo y que trabajen siempre para mejorar. Nosotras estamos luchando mucho para que en el futuro esto cambie y que las niñas puedan disfrutar de las cosas que de repente nosotras no disfrutamos, pero yo sé que esto va a cambiar y que si aman tanto el fútbol que lo disfruten. Hay que hacer sacrificios para llegar a ser grandes, para llegar a una selección, para estar en los mejores clubes y sobre todo que se diviertan haciendo lo que aman y que lo hagan siempre con mucha pasión.