Imagen: Diario AS
El Athletic es uno de los equipos de fútbol más románticos que existen en la actualidad, no en vano, el conjunto rojiblanco mantiene intacta su filosofía de jugar con jugadores vascos o criados futbolísticamente en el País Vasco. Como reza su himno, “herritik sortu zinalako” significa creado en el pueblo, algo que hace especial al equipo bilbaíno. Como no podía ser de otra forma, esta idea de gestión alternativa, también se hace latente en su equipo femenino, el cual es uno de los más laureados en la actualidad en la Primera División del fútbol español. Con más de 15 años de existencia, conocemos más de cerca el club de la mano de su ex-capitana, Iraia Iturregi.
Con más de 100 años de historia, el Athletic Club es uno de los casos peculiares en el fútbol actual, ya que, a pesar de su política de fichajes, el equipo bilbaíno nunca ha descendido y se ha mantenido siempre en la máxima categoría del fútbol español. Copas, Ligas, Supercopas… muchos han sido los éxitos cosechados por el equipo masculino, aunque las chicas nada tienen que envidiar de ellos. El Athletic constituía su equipo femenino en el 2002 y desde ese momento, ya daba de qué hablar. Su ex-capitana, Iraia Iturregi, quien además de portar el brazalete, ha disputado más de 400 partidos con el club, explica que el Athletic “es una forma de vida, de sentir. Desde pequeños se nos inculca el amor por el club y como éste tiene unos valores de vida, a parte de los deportivos, creo que los vizcaínos nos sentimos muy identificados con ellos. Como se suele decir aquí, el Athletic es como una religión. Gracias a la filosofía y a sus valores, te sientes tan identificado que al final es parte de tu vida”. Ese sentido de pertenencia se nota desde pequeños, ya que los niños sueñan con jugar en el Athletic. Afortunadamente, desde la creación de su equipo femenino, las chicas ahora también sueñan con vestir la camiseta rojiblanca. Como explica Iraia, “los chicos tenían el sueño de jugar en San Mamés. Las chicas, al final, teníamos el mismo sueño, aunque realmente no era posible. No obstante, cuando tenía 17 años, el Athletic crea la sección femenina. Yo en ese momento estaba jugando en el Leioa, el mejor equipo del País Vasco en aquel momento, y el club decide fusionarse con la entidad. En aquel momento, las jugadoras del Leioa, además de algún fichaje que se realizó, constituimos el Athletic Club. Afortunadamente, tengo el privilegio de entrar a Lezama como jugadora, entonces fue como un sueño hecho realidad. Al final, ves cómo lo que soñaban los chicos de clase, algo que, para una era imposible, finalmente, la chica es la que acaba llegando a esa meta”.
El club significó “un boom” desde sus inicios, ya que logró cuatro títulos de liga en sus primeros cinco años de existencia. La ex-capitana recuerda con orgullo aquellos años, ya que, como explica, el apoyo de la afición rojiblanca se hizo notar desde el primer momento: “Todos los partidos teníamos entre 1.000 y 2.000 personas, llegando incluso a tener la posibilidad de jugar en San Mamés, donde albergamos 25.000 seguidores. Este número se logró mejorar poco después, cuando logramos reunir 35.000 personas, proclamándonos campeonas. Sinceramente, creo que ese fue un punto de inflexión, ya que fue un récord”. Títulos ligueros, la posibilidad de jugar en Europa, el calor de la sociedad vizcaína… Las chicas habían logrado todo de la nada, algo impensable poco tiempo atrás.
Después de los cuatro campeonatos ligueros, llegó el quinto, aunque hubo que esperar para éste. El Athletic cosechaba su quinta liga hace tres años, cuando daba la sorpresa y lograba hacerse con el título. La competitividad aumenta cada año en la Primera División española, aunque el Athletic sigue fiel a sus principios de competir con gente de la casa: “La competitividad de la liga va a más. Últimamente se está viendo que los clubes invierten en fichajes y las jugadoras extranjeras quieren venir a España. Hoy en día son unas 100 las foráneas que están compitiendo aquí, jugadoras que además son internacionales con sus países. Eso por un lado es positivo para la liga, ya que aumenta la competitividad, pero para el Athletic no es tan bueno, ya que con nuestra filosofía nos resulta complicado competir con equipos como el Barcelona o el Atlético de Madrid. No obstante, seguimos siendo competitivas y aunque quizás no podamos aspirar a ganar la liga, nuestro objetivo es pelear, algo que estamos haciendo, ya que a día de hoy somos cuartas. Además de eso, nuestras ilusiones están puestas en la Copa, ya que, al disputarse a partido único, nunca se sabe lo que puede suceder”.
Iraia en la actualidad es parte del cuerpo técnico del primer equipo femenino del Athletic Club. Tras muchas temporadas con la elástica rojiblanca, la capitana colgó las botas hace dos años y desde entonces sigue ligada al club de sus amores. Hoy en día, significa un referente para las jóvenes que aspiran a llegar donde ella llegó y poder defender la zamarra el equipo de su tierra.
“Referencia de la sociedad”
La importancia del equipo femenino en la ciudad es tal que el año 2013, Iraia fue elegida pregonera de las fiestas de Bilbao, la Semana Grande. Ella tomó el rol de uno de los personajes icónicos por excelencia del periodo festivo, ya que fue la encargada de leer el discurso que daba inicio a las festividades, así como participó en todos y cada uno de los actos organizados durante los días festivos de la villa. “Como jugadoras del Athletic, con lo que el club significa para la sociedad, tenemos una responsabilidad deportiva, pero también social. Para mí fue un premio, ya que es un honor ser pregonera de las fiestas. Por otro lado, te lo tomas como una responsabilidad, ya que intentamos ser un referente positivo para dar el mejor ejemplo posible y en ese sentido el Athletic ha ayudado, ya que el club también tiene la responsabilidad social de intentar mejorar la sociedad, algo que va a más, y socialmente considero que estamos consiguiendo cosas positivas”.