Que rico es encontrarse con noticias como esta, una jugadora colombiana que parte a otras tierras para continuar su formación como futbolista profesional, así conocí a Lizeth Camacho. Me inquietó saber quién era –debo ser sincera, no estaba en mi base de datos mental- le escribí e inmediatamente me contestó, un hola bastó para saber lo sencilla y lo dispuesta que estaba para atenderme.
Esta mujer de 22 años, estudiante de arquitectura, amante de la música de Leo Dan, fue capitana del club al que perteneció por tres años, Real Boyacá.
Antes de ser lo que hoy representa en el fútbol, al contrario de muchas, su vida deportiva comenzó desde los 6 años pero como taekwondista, “fui selección Colombia en taekwondo, luego jugué con el club Camaritas en Yopal – Casanare (micro-fútbol), ya después jugaba con un grupo de amigas, y luego pase al club Real Boyacá”.
Me pareció interesante el por qué este cambio de deporte a lo que me respondió: “Bueno el taekwondo me fue inspirado por mi mamá que fue la que me aportó su conocimiento, desde los 6 años hasta los 18. Inicié en la liga de Boyacá con mi padrino Cito Forero, actual entrenador selección Colombia de taekwondo. Luego pasé a la liga de Casanare. En ese entonces no era bien pago. El fútbol siempre me gustó y lo practicaba a escondidas, hasta que me lesioné; paré por un año todo mi evento deportivo, luego me recuperó un profesor de fútbol que se llama Òscar Fonseca, en 5 meses me recuperó”. Desde ese tiempo empezó y decidió que lo suyo era el fútbol y comenzó a jugarlo profesionalmente.
Su mamá ha apoyado toda su carrera deportiva “nunca me ha dejado sola en ninguna de mis decisiones es mi apoyo mi guía y mi voz de esperanza”.
Ha estado en un micro ciclo con la selección Colombia en noviembre del 2014, donde expresó que es lindo estar con las mejores del fútbol colombiano.
Llegó a las filas del club argentino San Lorenzo de Almagro, gracias a su manager Julio Ernesto Gómez, quién fue el que hizo el contacto con el equipo, y le dieron la oportunidad de ir a presentarse, “y bueno los directivos todos decidieron q yo hiciera parte de este tan importante club”.
Para finalizar no podía dejar pasar y hacerle la pregunta sobre qué le parecía la aprobación de la liga profesional femenina en nuestro país: “Bueno es lindo porque por fin se dieron cuenta que era muy necesaria para Colombia, ya que los resultados de la selecciones femeninas hablan por sí solas, los procesos y todo lo que lleva de su mano. Solo que hay q tener en cuenta que hay clubes de mucho tiempo trabajando y es importante que no les quiten la oportunidad de hacer parte de la liga femenina” aseguró Lizeth.
El sueño de esta volante 5 es poder algún día llegar al Atlético de Madrid, y por qué no portar la amarilla de nuestra selección.
Ya ella se encuentra en tierras gauchas, en concentración con su nuevo equipo, a espera que empiece la liga.
Fémina Fútbol le desea éxitos en su nuevo camino y que siga dejando el nombre de nuestro país en alto.