Jenny Torres, juez de línea profesional dialogó con Fémina Fútbol sobre su carrera como árbitra en Colombia, su proceso para llegar a la profesionalización y proyecciones en el fútbol.
El fútbol femenino no solo acapara jugadoras, cuerpo técnico o dirigentes; también dentro de esta rama se encuentra el arbitraje femenino, una profesión que imparte el orden pero que son las primeras señaladas tras cualquier jugada dentro del campo. Una vista diferente que también ha venido creciendo a la par tras la profesionalización del fútbol femenino colombiano.
Para Jenny, su proceso de iniciación fue gracias a los estudios realizados en el Sena y de ahí llegó la oportunidad para seguir creciendo en este campo del fútbol hasta llegar hoy en día a la profesionalización. “Comenzó en el 2013. Realizaba un tecnólogo en entrenamiento deportivo en llegó un momento que me toca realizar la etapa productiva y ahí manifestaron que en la Asociación de Árbitros de Fútbol de Cundinamarca podía cumplir esta etapa final en mí proceso educativo. Ese fue el momento en que llegue a la Asociación Arbitral y arrancó mi proceso en esta hermosa labor”, manifestó la juez.
Igualmente, para ella todo ha sido un proceso y le ha tocado ir poco a poco para ganarse un lugar en las ternas arbitrales. “No es nada fácil, considero que ser profesional es más un tema de trazarse metas y trabajar día y noche para alcanzar dichas metas. Obviamente esto debe ir acompañado de un trabajo a conciencia y constancia. Me gusta asumir cada reto que requiere esta profesión y siempre con la mentalidad de superarme en el tema de escalones, cada día quiero estar más arriba para disfrutar todas las etapas del arbitraje”.
Torres es árbitra FIFA desde 2020 “es mi primer año portando está hermosa escarapela” y por ello, sabe la importancia que tiene llegar a este máximo ítem dentro del fútbol, que le permitirá a futuro cubrir campeonatos internacionales y tiene claro su meta como juez de línea FIFA. “En el fútbol femenino quiero estar en un mundial de mayores y en hombres, donde el mundo del fútbol me lo permita, pero me preparo día a día para cada reto que este deporte me trace”, mencionó.
Uno de los factores de cualquier árbitro dentro de una cancha siempre será la presión ante cualquier duda en jugadas específicas que ocurren en el terreno, pero Jenny Torres admite que siempre ha estado segura en sus decisiones y ha aprendido a manejar las diferentes circunstancias que conlleva cada partido. “Eso es un tema psicológico y los árbitros manejamos de diferentes maneras este aspecto. En mi caso el tema de la presión me juega a favor porque me motiva a realizar un buen trabajo y demostrarme inicialmente que estoy hecha para cosas grandiosas, demostrarle a las personas que me dan la confianza y me dan la oportunidad de estar en cada escenario y por último a las personas que están en un estadio como dirigentes, hinchas, jugadores y familiares de los mismos”.
Por último, Jenny explicó la importancia que tiene estar en coordinación con los jueces centrales para tomar la mejor decisión y ser lo más preciso posible. “Es un tema de roles porque los cuatro árbitros dentro del terreno de juego tenemos muchas responsabilidades y demasiados retos pero todos estamos concentrados y queremos que el partido salga en las mejores condiciones. Sin embargo, el asistente considero que maneja un nivel de concentración muy alto por el tema del fuera de juego que es nuestra principal tarea. Eso hace que las personas consideremos que es la decisión más difícil de un partido”, finalizó.
Por el momento Jenny Torres se seguirá preparando para llegar de la mejor forma a la próxima Liga Femenina que se disputará en este tramo final de 2020 y así seguir contribuyendo a las mejores decisiones para las protagonistas e impartir organización y equilibrio para los equipos que lucharán en esta cuarta edición.
Fotos: archivo Jenny Torres